Durante
el primer año de la Primera
Guerra Mundial,
ninguno de los combatientes ofrecía cascos de acero
a
sus tropas. Los soldados de la mayoría de las naciones que entraron
en combate usaban gorros de tela que no ofrecían virtualmente ningún
tipo de protección contra las armas modernas. Únicamente las tropas
alemanas usaban el Pickelhaube,
cubrecabezas de
cuero tradicional pero también de poco valor militar.
El
número enorme de heridas mortales que las armas modernas infligían
al ejército francés las condujo a introducir el primero de los
cascos de acero modernos en el verano de 1915. Pensados no como
protección contra impactos de balas sino mas bien destinados a
minimizar las heridas de metralla
en
la cabeza. Los primeros cascos franceses eran gorros de acero en
forma de cuenco usados debajo de los cascos de tela. Sin embargo,
estos cascos rudimentarios pronto fueron substituidos por el casco
Adrian modelo 1915,
(diseñado por August-Louise Adrian). Substituyó el kepi
francés
tradicional y más adelante por los ejércitos belga e
italiano.
Simultáneamente
la oficina británica de la guerra encomendó al Departamento de
Inventos de la Oficina de Guerra evaluar la viabilidad del diseño
francés. Descartado por ser lo bastante resistente y demasiado
complejo para realizar una fabricación rápida y masiva se optó por
un nuevo diseño presentado por John L. Brodie. Este ofrecía
ventajas sobre el diseño francés ya que podría ser fabricado de
una sola hoja gruesa de acero. El ejército británico usó el casco
por primera vez en septiembre de 1915, pero no fue hasta la primavera
de 1916
en
que el casco comenzó a ser distribuido masivamente a las tropas del
Imperio
británico
Ypres, Casco MKI |
Con
la entrada de los Estados Unidos en la guerra su departamento de
guerra adquiere inicialmente unos 400.000 cascos a Gran Bretaña. A
partir de enero de 1918 el ejército de los EE.UU. comenzó la fabricación de su propia versión, siendo llamados M1917.
Casco M1917. |
El
casco con su característica forma "plato de sopa" estaba
diseñado originalmente para proteger la cabeza y los hombros del
portador contra los fragmentos de metralla que caían de arriba. El
diseño de tazón bajo permitió el uso de acero relativamente grueso
al que se podría dar forma en una sola presión manteniendo el
grosor del casco. Aunque esto lo hizo más resistente a los
proyectiles, el diseño ofrecía menos protección a la parte
inferior de la cabeza y del cuello que otros modelos. El casco de
acero era conocido por las tropas como un "sombrero de lata"
o para los oficiales un "bombín”
de
batalla.
En
1938 el rearme alemán y la agresiva política del gobierno nazi pone
sobre la mesa la escasa preparación del ejercito británico para una
guerra que ya se empezaba a ver como algo mas que probable En
consecuencia la producción bélica se intensificó produciéndose
una nueva “hornada” de cascos designados como Mk.II. Finalizado
el conflicto se producirían mas de 12 millones para los países de
la Commonwealth.
Hecho
de 0,98 mm de manganeso no magnético con un aro de acero inoxidable,
el Mk.II pesaba 1,05 kg. La cúpula y el borde eran menos circulares
que el Mk.I, y mucho mejor acabados ya que carecían de ondulaciones
que a menudo se ven en los cascos Mk.I. El cuerpo es de
aproximadamente 5 mm más ancho y 5 mm más corto que el Mk.I.
Casco MkII |
Casco MkII |
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